“JESUCRISTO SUBIÓ A LOS CIELOS, Y ESTÁ SENTADO A LA DERECHA DE DIOS, PADRE TODOPODEROSO”
El cielo es el estado de felicidad eterna. Se
trata de un retorno al estado de la humanidad
anterior a la caída, un segundo y renovado Jardín
del Edén en el que la humanidad se reúne con Dios en un perfecto
y natural estado de existencia eterna. Esta reunión se logra mediante la obra
redentora de Jesucristo de morir en la cruz por los pecados de la humanidad. El
cielo es, pues, el estado de gozo, paz y felicidad infinita y eterna.